En marzo de 2013, el alcalde de Londres, Boris Johnson, anunció una mega ruta urbana como parte de la apuesta londinense de duplicar el número de ciclistas en la próxima década. De igual modo, la ciudad planea reducir 60% su emisiones de carbono para el año 2025.
Existen beneficios obvios de andar en bicicleta. Un estudio encontró que mientras hay gente que muere cada año en bici (en 2012, 122 ciclistas murieron en el Reino Unido), muchos más mueren prematuramente debido a falta de ejercicio. El estudio estimó que pedalear una bici con regularidad provee un beneficio neto a la salud que sopesa sus riesgos por un factor de 20 a uno. Esta situación es mucho más extrema en la actualidad debido a las estimaciones de obesidad tan altas.
A pesar de todo esto, ¿por qué no hay mucha más gente en bici? Quizá podamos aprender un poco de la experiencia de Holanda.
La población de Holanda es de casi 17 millones de personas. En un día normal, alrededor de 5 millones de personas realizan 14 millones de viajes en bicicleta. Algunas de las razones de este éxito holandés son primero que nada, es un país plano. En segunda, es un país relativamente pequeño por lo que el espacio para los vehículos tiene un costo alto. El gobierno ha invertido fuertemente en infraestructura, desde carriles ciclistas hasta almacenes de bicis. El país cuenta con sistema de transporte muy bien desarrollado compuesto por trenes, autobuses y tranvías.
También existe el tema importante de la seguridad real y la percibida. Las estadísticas muestran que Holanda es el lugar más seguro del mundo para andar en bici. Cuentan con infraestructura bien diseñada y una cultura ciclista debido a que como casi todos andan en bici, hay empatía y concientización en las calles.
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AUTOR Wayne Visser
VÍA The Guardian
FOTO Tiago Oliveira