Bicicleta libre

La forma más verde de transporte mecanizado, andar en bicicleta, está al alza en varias ciudades del país ayudada por la creación de una red de carriles exclusivos y se vislumbra que será una de las industrias del futuro cercano con mayor auge a nivel mundial. Al mismo tiempo están surgiendo iniciativas para masificar su uso de forma libre.

Han pasado muchos años desde que comenzaron los primeros sistemas de préstamo de bicicletas en Holanda en los 60’s. Este sistema permitía andar en bicicleta gratuitamente entre dos puntos y dejarla para que alguien más la usara pero no prosperó ya que al cabo de un mes casi todas las bicicletas habían sido robadas o descompuestas.

Actualmente, existen sistemas de préstamo de bicicletas de diferentes tipos y tamaños en muchas ciudades del mundo a la vez que están por comenzar grandes programas en Inglaterra (Londres) y Estados Unidos (Minneapolis).

El principio es un préstamo casi gratuito de bicicletas para transportarse en las ciudades que permite reducir los congestionamientos, el ruido y la contaminación. Al cabo de algunos años o meses, el préstamo de bicicletas ha sido todo un éxito en casi todas partes donde se ha implementado ya que los usuarios los adoptan rápidamente. De hecho, su éxito ha sido tan grande que demanda su ampliación (aumentar el número de estaciones y bicicletas) a zonas que antes no estaban cubiertas. A continuación analizamos algunos sistemas diferentes en tamaño, funciones y ubicación.

“La bici es el aparato de transporte más elegante.”


Bicipuma – Ciudad de México

Transportarse dentro de Ciudad Universitaria (UNAM) nunca había sido tan eficiente. Estudiantes, profesores y trabajadores pueden utilizar estas bicicletas a través de diversos módulos que se encuentran en el campus desde el 2005. Existen más de 2000 bicicletas y 5.5 kilómetros de caminos especiales que permiten trasladarse entre diferentes puntos de manera gratuita en periodos menores a 20 minutos.

Mejor en bici – Ciudad de México

Una iniciativa a pequeña escala que surgió de la asociación entre el Fideicomiso Roma-Condesa y una empresa de equipos de telefonía celular. Actualmente consta con dos centros de préstamo dentro de la colonia Condesa (Parques México y España) y 40 bicicletas. Los usuarios pueden utilizar gratuitamente la bici para transportarse a cortas distancias y pueden tenerla por varias horas. Solo deben dejar un depósito de 200 pesos y una identificación. Solo falta que le incorporen canastillas a las bicicletas para que puedas poner tu mochila, bolso o una bolsa de pan bien condechi.

Bécikvert – Montreal, Canadá

Sistema de préstamo gratuito en el barrio de Mont Royal, lugar bohemio y comercial. Comenzó en julio pasado por iniciativa de la asociación de comerciantes de la zona. Se necesita una identificación y dejar un depósito de 300 pesos. Cuenta con 40 bicicletas. Tienen planes para asociarse con las autoridades locales y ampliar su capacidad. El centro de préstamo se encuentra a la salida de la estación del metro del barrio en donde los usuarios las usan para recorrer hasta los últimos callejones para descubrir pequeños cafés y tiendas.

Vélib – París, Francia

Tomar una bicicleta en una estación y dejarla en otra, cualquier día y a cualquier hora.

Este es uno de los sistemas más sofisticados y abarca muy buena parte de esta gran ciudad a la que ya se le comienza a llamar como la ciudad de las bicicletas. En estos días ruedan cerca de 30 mil bicicletas con un costo de 1 euro por un día, 5 euros por semana y 29 euros por año. El éxito del sistema radica en que limita el tiempo de préstamo a 30 minutos, es decir, uno toma una bicicleta en una cicloestación se transporta al destino y la devuelve en otra estación. Puedes hacer viajes cortos ilimitados siempre que sean menores a media hora y cada 30 minutos extra cuestan 1 euro. Con esto se incentiva que todas las bicicletas están en uso y realicen 10 a 15 viajes diarios. Es administrado con un avanzado sistema de cómputo instalado en cada una de las 1500 estaciones que monitorea la ubicación y condiciones de cada bici. Se registran los datos de una tarjeta de crédito, un depósito equivalente a 2000 pesos y datos personales con lo que, aunado a su diseño, resultan vehículos menos propensos a robo y vandalismo. Las bicicletas cuentan con un diseño exclusivo que permite una integración armoniosa con el paisaje, además de proporcionar confort y seguridad. Son robustas (22 kg) ya que se utilizan al menos 10 veces diarias y cuentan con luces delanteras y traseras que se encienden con la energía generada por el pedaleo. Vélib es producto de una alianza entre el gobierno de la ciudad y empresas de publicidad exterior. A tan solo año y medio de vida, planean ampliar su cobertura a algunos suburbios.

¿Algún día contaremos con algo similar en México? Se vale soñar…

Este artículo fue publicado originalmente en Reconecta 01 (invierno 09).

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